Lolita Ayala rompe el silencio y revela la razón por la que la corrieron de Televisa

Por muchos años, Lolita Ayala fue una de las periodistas estelares de Televisa. Comenzó a laborar en la empresa en la década de los 70s, en el noticiero “24 horas” del periodista Jacobo Zabludovsky. Posteriormente, se convirtió en la directora general de ese espacio informativo. Unos años después, asumió la conducción y dirección de “Muchas Noticias”, que después se llamó “El Noticiero con Lolita Ayala”, estando en el aire durante 29 años. La última emisión del programa informativo se realizó en agosto de 2016, sustituido por “Las Noticias” con Karla Iberia Sánchez.
En una entrevista en el podcast “Sensibles y Chingonas”, de la emprendedora y escritora mexicana Romina Sacre, la periodista Lolita Ayala habló por primera vez sobre el motivo por el cual la sacaron de su noticiero. La también locutora y reportera, originaria de la Ciudad de México, sabía que habría cambios en la empresa, sin embargo, jamás se esperó el pretexto que le dieron para justificar su salida. “Nunca me imaginé que el motivo por el que me quitaran, fuera que había caras más jóvenes, no bonitas, jóvenes, no me esperaba ese pretexto para decirme adiós, pero no fue Emilio Azcárraga, fue su segundo que hace lo que quiere y que no voy a decir su nombre”.
Sin embargo, Lolita Ayala, de 73 años de edad,al salir de la empresa fue la mujer más feliz del mundo. “Caras nuevas, si ya estaban acostumbrados a mí, ¿qué tiene que sea cara vieja o no tan joven? Si, eso si me cayó gordo, pero, pues ni modo, tuve que apechugar, me salí y fui la mujer más feliz del mundo, porque después de estar amarrada con un grillete a una empresa, a un medio, a todo, tenerme que levantar todos los días, bañarme, lavarme el pelo, peinarme, pintarme, pegarme la pestaña, ver que me voy a poner, porque ayer me puse el azul, antier me puse el verde, en fin, era una odisea y así todos los días durante 45 años”.
La periodista dijo haber sentido mucha paz al saber que podría descansar placidamente. “Cuando vi que ya iba yo a descansar, que me iba a levantar a la hora que yo quisiera, que se me diera la gana…¡ay, qué alegría y qué paz! Es una bendición poderse levantar a la hora que uno quiere, sin despertador”.
Por otra parte, Lolita Ayala sigue sufriendo las secuelas de su accidente aéreo, el cual ocurrió un año antes del final de su noticiero. En agosto de 2015, acompañó a César Duarte, gobernador de Chihuahua, México, y a su esposa, Bertha Gómez de Duarte, a entregar unos apoyos a familias de escasos recursosen la zona serrana. Cuando regresaban al rancho del político en el municipio Balleza, el helicóptero en el que viajaban se desplomó. La periodista tuvo una severa lesión en la columna.
"Desde que me caí en el helicóptero ya no quedo bien mi columna porque se rompió y luego me caí en mi casa, me rompí la cadera y el fémur para acabarla de amolar, entonces, no me ha quedado bien la pierna derecha que es en la que me pusieron la rótula del fémur y ando con bastón", comentó anteriormente en entrevista con varios medios de comunicación.